Protección de núcleos de fin de temporada
                Los núcleos de fin de temporada se realizan después de la cosecha y su objetivo es siempre tratar de aprovechar el gran volumen de abejas de las colmenas, muchas de las cuales se perderían durante el transcurso del período invernal.
Estos núcleos, llamados también tardíos, deben ser bastante más fuertes y grandes que los núcleos de principios de temporada.
Las colonias podrán pasar el invierno en cajones nucleros de buena construcción o en cámaras de cría, en este último caso deben colocarse guardapiqueras y utilizar poncho o partidor con el fin de aislar el espacio ocioso existente dentro del cajón.
Alimentación y ubicación de los núcleos
La reserva de miel de un núcleo al comienzo de la invernada será de, al menos, dos panales completos. Como los núcleos “tardíos” son colonias que carecen de un número de pecoreadoras suficiente como para recolectar en la próxima primavera una cantidad significativa de néctar, el secreto del crecimiento de los núcleos de fin de temporada en la próxima mielada está en la adecuada alimentación por parte del apicultor durante la primavera.
¿Cómo invernar núcleos?
Una de las preguntas que suele aparecer es cómo invernar los núcleos sobre las colmenas para tratar de aprovechar al máximo su calor.
Algunos apicultores directamente sacan el techo de la colmena y allí colocan una entretapa elaborado con tela mosquitera, y a continuación un alza estándar con sólo un agujero, realizado con una mecha de 9 milímetros (esto sólo de piquera para el núcleo superior). En el alza estándar arman el núcleo y luego colocan el techo. Los productores más experimentados destacan que es muy importante para de esta manera revolver lo menos posible durante los meses más fríos.
Método de colmenas superpuestas
Se toma una colmena bien fuerte de dos cuerpos (2 alzas) y, al hacer la división, en el alza superior colocan la mitad de los cuadros de cría, tanto abierta como cerrada, más cuadros de miel y polen y una buena cantidad de abejas. Hay quienes incluso colocan en el alza superior también la reina, para que este núcleo prospere con más rapidez.
Acto seguido, dividen las dos alzas con una rejilla excluidora y sobre su marco le incrustan un tejido mosquitero.
Una opción aquí es hacer un marco con doble tejido, otra es usar una entretapa con un agujero en el centro y luego colocar un trozo de tejido de cada lado de la entretapa. Esto a fin de que cuando se encuentren las dos reinas no se peleen entre sí. La piquera del núcleo superior, en este caso, es un pequeño corte del marco de la entretapa (2 centímetros de largo por 5 milímetros de profundidad) y va ubicado en contra de la piquera original o sea hacia atrás.
Nucleros de telgopor
Entre los métodos más originales, se encuentran los de aquellos apicultores que invernan sus núcleos de fin de temporada en cajas de telgopor. Utilizan las conservadoras, como en las que vienen los medicamentos de las droguerías, y le colocan los cuadros (4, 5 ó 6 según el tamaño) adentro. Otros, le colocan la caja “de sombrero” a los núcleos. Usando la caja de sombrero, según explicaron los apicultores, no se produce humedad y el viento o la helada del invierno no chocan directamente con las paredes del nuclero.
Métodos para la invernada en lugares de inviernos rigurosos
Colmenas de 10 cuadros y núcleos de cría (con 5 cuadros) es una pareja apropiada para la invernada en lugares de temperaturas muy bajas. Se coloca el núcleo encima de una colmena, que lógicamente estará muy fuerte, y con alimento suficiente. Previamente se le habrá quitado el techo, de tal forma que el núcleo de invernada descanse sobre la entretapa.
El núcleo recibe así el calor de la colmena de abajo a través de la entretapa. Si el núcleo no tiene suelo, la entretapa hace las veces de suelo. Otro punto a tener en cuenta es que hay que tapar las zonas laterales con corcho blanco y un protector de lluvia (plástico) para que la colmena de abajo no pierda más calor del imprescindible y para que no se moje. Encima de esta torre, se coloca el techo de la colmena, bien sujeto para que no caiga por el viento.
