Italia

«Esta ha sido la cosecha más difícil de mi vida», destacó Riccardo Polide, apicultor italiano, quien considera dramática la situación por la poca producción, que ni siquiera garantiza la supervivencia de las abejas y que representa claramente el sentir de varios de sus colegas.
A pesar de que la temporada había comenzado bastante bien, un repentino regreso del frío afectó gravemente las floraciones, especialmente la de acacia, y esto provocó graves inconvenientes.
El poco néctar que las abejas lograron recolectar no fue suficiente para ellas y el apicultor se vio obligado, paradójicamente, a ofrecer jarabes de azúcar a base de fructosa con el objetivo de mantenerlas vivas.
Por otra parte, la floración del castaño se vio severamente afectada por el calor y apenas duró unos días, cuando en el transcurso de una temporada normal puede extenderse por espacio de dos o tres semanas.  Un dato que refleja claramente la difícil situación del sector indica que en la región de Polide se cosechó un total que ni siquiera alcanzó los diez kilos por colmena, es decir apenas una sexta parte de lo que se puede obtener normalmente.  «El valor de nuestra producción es menor que el valor de los alimentos que tuvimos que darles», lamentó el apicultor, quien tuvo que alimentar también en septiembre a las colonias para que puedan superar el invierno. «Podemos responder por esta temporada, pero si las temporadas que vienen van a ser tan difíciles, la empresa corre el riesgo de desaparecer», prosiguió.

Complicaciones

Para el experto en el tema Samuele Colotta, es preocupante la situación de los apicultores debido a una serie de cosechas desfavorables desde hace siete años. Todo indica que el cambio climático afecta tanto a las abejas como a las plantas.
Los inviernos son más dulces y cortos con respecto a los del pasado, y después de que comienza la primavera con altas temperaturas, llega una ola de frío, como ocurrió en el 2017, y además aparecen lluvias repentinas y prolongadas que también causan daños importantes.

Miel china

La importación masiva de miel extranjera, particularmente de China, también ha reducido los precios, lo que significa que los productores italianos luchan por obtener suficientes ganancias para cubrir sus costos. Actualmente no existe una legislación europea que exija que los vendedores especifiquen el origen de la miel, y muchos apicultores dicen que las mezclas chinas están adulteradas, un problema sumamente importante que es de público conocimiento pero que por el momento no tienen ningún tipo de solución.

1 pensamiento sobre “Preocupación en Italia

  1. me deja muchas dudas el comentaerio de ese productor apicola italiano ., cuando dice que europa no tiene aun una legislacion que obligue identificar el origen de la miel ., y nuestros exportadores juantamente con senasa nos obliga la trazabilidad ,aduciendo que la exige el mercado europeo..y tambien hace mencion a la entrada de miel china ,la que califica con problemas de adulteracion ., conclusion .,,poque tenemos tanto requisito para vender a europa., si en realidad estan comprando cualquier cosa los europeos ?.

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