Más herramientas para posicionar la miel pampeana en nuevos mercados

A partir de un proyecto entre el ministerio de Producción de La Pampa, el INTA, la Facultad de Agronomía de la Universidad Nacional de La Pampa y el INTI, se busca promover el agregado de valor en el sector apícola, así como la caracterización y diferenciación en el producto.
Con el objeto de brindar a los apicultores de la provincia de La Pampa herramientas de agregado de valor, el ministerio de la Producción de La Pampa, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), la Facultad de Agronomía de la Universidad Nacional de La Pampa y el INTI están trabajando articuladamente en un proyecto para diferenciar sus mieles del bosque de Caldén Pampeano y promover el acceso a nuevos mercados.
En tal sentido, el INTI se encarga del análisis sensorial, para lo cual personal calificado de la subgerencia Operativa Regional Pampeana realizó la selección, entrenamiento y capacitación del panel sensorial bajo pautas establecidas en normas IRAM 20005 e IRAM 15980, respectivamente. El panel está conformado por personal de la sede del instituto en La Pampa y de las demás instituciones participantes del proyecto.
En este marco, se aplica la metodología de análisis establecida en la normativa de referencia antes mencionada para la evaluación de cada muestra: se describen los atributos de apariencia, textura y flavor, y, dentro de éstos, los descriptores específicos que le darán una identidad a la miel del caldenal.
“El mercado de la miel es un ambiente complejo, y tener una miel caracterizada es una herramienta importante con la que podemos contar los productores pampeanos para ubicarla en nuevos clientes y mercados, sin necesidad de competir con las empresas acopiadoras exportadoras que manejan otros volúmenes de venta” indicó el apicultor Hugo Quitllet.
Esta iniciativa para caracterizar la miel pampeana pretende lograr una diferenciación real de la producción apícola y plasmarla en alguna herramienta de agregado de valor como un sello de calidad o de identificación geográfica por tratarse el bosque de caldén como un área vegetal única en el mundo. Para poder capitalizar estas ventajas competitivas, es necesario coordinar, colaborar y diseñar estrategias, programas y acciones conjuntas a largo plazo entre los diversos actores del complejo apícola que potencien las características y capacidades distintivas de La Pampa.
Se espera que el proyecto de “Caracterización de mieles del bosque de Caldén Pampeano” tenga una duración de tres años y tiene previstas las siguientes actividades: relevamiento y convocatoria de productores apícolas de la región fitogeográfica del bosque de caldén; colecta de muestras de miel producidas en la región; realización de análisis fisicoquímicos, polínicos y sensoriales y capacitación y asistencia técnica en temas relacionados al proyecto.
La apicultura en La Pampa constituye una actividad que dinamiza y genera un aporte significativo a la economía regional, ya que la provincia se posiciona en los primeros lugares de participación en el mercado de exportación nacional e internacional de miel con el 11 por ciento, junto a otras provincias como Buenos Aires -que acopia miel del resto del país-, Santa Fe, Entre Ríos y Córdoba.
La provincia de La Pampa tiene una superficie de 143.440 kilómetros cuadrados y se pueden diferenciar tres grandes áreas agroecológicas: la Estepa, el Caldenal y el Arbustal.
El Caldenal ocupa la franja central de La Pampa con una extensión aproximada de 48.450 kilómetros cuadrados, tiene un estrato arbóreo y arbustivo compuesto en su mayoría por especies autóctonas y un estrato herbáceo muy modificado por acción de la ganadería, dentro del cual hay una gran cantidad de especies muy visitadas por las abejas. En esta área, la producción de miel tiene su mayor sustento en la floración de árboles adultos (caldén, algarrobo, chañar, molle) y arbustos (piquillín, llaollín, jarillas).
También son de mucha importancia especies como romeros, manzanilla y poleos. Son muchos los factores del Caldenal que inciden en forma positiva sobre la vida productiva de las colmenas, algunos de ellos son la fisonomía, la variada composición florística y la ausencia en el uso agroquímicos constituyendo un ecosistema único en el mundo.
Créditos
Con el fin de potenciar el crecimiento del sector desde el Ministerio de la Producción se cuenta con una línea de crédito a tasa bonificada destinada a la actividad apícola. El crédito puede utilizarse por un lado para la inversión en colmenas, dispone una suma de $ 20.000 por colmena a adquirir, con un plazo de 36 meses y con una bonificación de tasa de hasta 15%. Y por otro lado, para capital de trabajo y otros activos: para los productores en actividad dispone de una suma de hasta $10.000 por colmena declarada; mientras que para productores iniciales dispone de una suma de hasta $ 10.000 por colmena a adquirir. Siendo el plazo total de 12 meses, con una bonificación de tasa de hasta 15%. Siendo el monto máximo global destinado para cada productor de $6.000.000.
La cosecha de miel fue la más baja de la década
Confirmaron que las consecuencias de la sequía se hicieron sentir en la cosecha de miel pampeana con rindes en los 15 kilos por colmena, marcando la peor producción en los últimos años.
En un año bueno los apicultores llegan a sacar hasta 45 kilos de miel por colmena, ahora ya se estimaba que iban a tener una producción reducida por la sequía, que perjudicó principalmente la zona de monte y fue un poco menos dura en la región norte porque hubo algunas precipitaciones. Desde octubre del pasado año que ya se veía un panorama complicado, dijo a RD el apicultor Alberto Marchesi.
Esa reducción en los rindes tiene como complicación que la miel además tiene una coloración más oscura que hace difícil su comercialización. En las exportaciones siempre se priorizan las mieles claras y el mercado interno llega a consumir apenas un 5% de la miel que se produce.
El apicultor y presidente de la Cooperativa de General Pico, Alberto Marchesi, aseguró que tuvieron la peor cosecha de los últimos 15 años: “de 30-35 kilos, pasamos a 15 kilos de miel”. Además, reveló que solo el 5% de lo que producen es para mercado interno, el resto se exporta y La Pampa está dentro de las cinco provincias que más produce.
Marchesi aseguró que “la temporada fue mala por la sequía: es la peor cosecha de los últimos 15 años. En un año normal, la cosecha es de 30-35 kilos y este año no pasamos los 15: solo cubrimos los gastos” “El clima fue el mayor problema”. El año pasado sacamos 450 mil kilos (1500 tambores) y este año no creo que lleguemos a los 700″.
La Cooperativa funciona en el Parque Apícola y Alberto detalló que “tenemos socios apicultores, que utilizan los servicios de la sala y los usuarios, que luego se van haciendo socios. Este año pasaron alrededor de 50 productores, no solo de la provincia, también de Lincoln, González Moreno, etc. También están los productores que viajan al norte del país por las floraciones tempranas, nosotros les hacemos el servicio de extracción a partir del mes de octubre”, aclaró.
A principio de año, el kilo de miel se pagaba 485-490 pesos, hoy no están comprando miel porque Europa quiere mieles claras y por la sequía salió la miel oscura, y como no lo quieren, lo pagan 290-300 pesos el kilo y la miel clara se paga 450 pesos el kilo. Marchesi indicó que es un año que apenas les permitirá cubrir gastos y tratar de mantener las colmenas hasta la siguiente cosecha. Una de las estrategias de muchos apicultores será usar la miel oscura, que se está pagando muy barata, para alimentar a las abejas y de esa manera afrontar los siguientes meses.
“Nosotros, como cooperativa, seguimos funcionando haciendo los cursos de iniciación, a partir de agosto, y ahora estamos ayudando a los productores porque van a quedar muchos tambores sin vender: los gobiernos nacional y provincial están ayudando para tener un fondo rotatorio para acompañar a los productores”.