Las feromonas de las abejas
Las mismas se comportan como un medio de transmisión de señales cuyas principales ventajas son el alcance a distancia y el poder de sortear obstáculos.
Las feromonas son mezclas de sustancias químicas liberadas por las abejas individuales en la colmena o el medio ambiente que causan cambios en la fisiología y el comportamiento específicos de otras abejas. Para muchos científicos la inteligencia de la colmena está en las feromonas.
Con frecuencia de la misma especie, pero también pueden emplearse contra otras especies (por ejemplo, algunos árboles atraen pájaros con sus feromonas para defenderse del ataque de insectos, y otros insectos emplean feromonas sobre sus competidores para desestabilizar su metabolismo). Las feromonas se comportan como un medio de transmisión de señales cuyas principales ventajas son el alcance a distancia y el poder de sortear obstáculos, puesto que son arrastradas por las corrientes de aire.
Las abejas
Tienen unos de los más complejos conjuntos de feromonas, sistemas de comunicación que se encuentran en la naturaleza, poseen 15 glándulas conocidas que producen una gran variedad de compuestos.
Las feromonas reales son producidas por las glándulas exócrinas de la reina ubicadas en la cabeza, tórax y abdomen. Las abejas perciben las feromonas a través de su sistema olfativo, que está ubicado en las antenas, y se trasmite entre las abejas del sequito real y las demás obreras de la colmena, en el roce corporal producido por la transmisión de alimentos entre las abejas (trofalaxia).
Las feromonas de la reina y de la cría mantienen la euforia de las obreras y las estimulan a realizar todas las tareas.
Las obreras estimuladas por un buen ingreso de néctar y polen desarrollan las glándulas hipofaríngeas productoras de jalea real y alimentan copiosamente a la reina que inmediatamente comienza a poner huevos en las celdas previamente preparadas por las obreras limpiadoras. Con los primeros nacimientos de las larvas a los tres días, las feromonas de la cría inducen a las pecoredoras a buscar polen para alimentar a las nodrizas y a las larvas mayores a medida que aumenta la postura se incrementa el flujo de las feromonas y se desarrollan las glándulas cereras obligando a las abejas cereras a construir nuevos panales. Las feromonas también regulan la construcción de los nuevos panales o el operculado de las celdillas llenas de miel madura. Cuanto mayor es el flujo de feromonas mayor cantidad de celdillas para miel y zángano se construyen.
El polen es necesario para el desarrollo de la cría y en especial para la cría de Zángano, en la medida que ingresa a la colmena buen polen se incrementa la cría de obrera primero y con ella y el incremento de la actividad de la reina se incrementan el flujo de las feromonas que a su vez inducen a las obreras a labrar celdillas mas grandes en las que depositará la reina los óvulos de los futuros zánganos.
Pero ni bien baja el ingreso de polen o baja su calidad, baja también la postura de la reina, disminuyen las feromonas, las obreras dejan de limpiar las celdillas grandes y se corta la postura de óvulos para zángano.
El incremento de las feromonas de la reina y de la cría de obrera induce la postura de óvulos para zánganos. Una reina vieja o deficiente con bajo nivel de feromonas reales cría menos zánganos normales. (Puede suceder que llegue a colocar óvulos en celdillas de obrera por la falta de espermas que lo fecunden y de estas celdillas nazcan pequeños zanganitos, lo que indicaría que la reina debe ser renovada si ya no lo hizo la colmena).
Ante la falta de estas feromonas por envejecimiento o enfermedad de la reina las abejas se desmoralizan y hasta abandonan el cuidado y guardia de la colmena. Este echo es aprovechado en ciertas épocas del año por colmenas invasivas para robar el alimento en un proceso denominado “Saqueó”, no pillaje que es otra cosa. Las abejas primero dan vueltas alrededor de la colmena desmoralizada y al percibir la falta de feromonas reales y de la cría deciden atacar ya que no hay riesgo de que esta se defienda. Roban a una colmena que de todas maneras está destinada a perecer ya que no fue capaz de renovar a tiempo su reina.
Tipos
Las feromonas de las abejas se pueden agrupar en dos tipos diferenciados:
– Feromonas liberadoras que afectan temporalmente el comportamiento del receptor y desencadenan una respuesta de comportamiento casi inmediata de la abeja receptora.
– Feromonas de imprimación que tienen un efecto a largo plazo sobre la fisiología del destinatario. Las feromonas pueden ser o bien los productos químicos individuales o una mezcla compleja de numerosos productos químicos en diferentes porcentajes.
Luego estas dos tienen otras subcategorías, algunas de las cuales se describen en detalle a continuación:
– Feromonas de Alarma
Son dos las principales feromonas de alarma que se han identificado en las abejas obreras. Una se libera por la glándula Koschevnikov, que se encuentra cerca del eje del aguijón. La glándula produce una feromona de alarma que se libera cuando una abeja pica a otro animal para atraer a otras abejas a atacar también y hace que las otras abejas se comporten de una manera defensiva. Contiene más de 40 compuestos químicos diferentes, Estos componentes tienen un bajo peso molecular y se evaporan rápidamente.
La otra feromona de alarma es liberada por las glándulas mandibulares y consta de 2-heptanona, que también es una sustancia muy volátil. Este compuesto tiene un efecto repelente y se utiliza para disuadir a los enemigos potenciales de las abejas. Curiosamente, las cantidades de 2-heptanona aumentan con la edad de las abejas y se hace más alto en el caso de las abejas forrajeras o pecoreadoras. Por ello, se sugirió que la 2-heptanona era utilizada por las pecoreadotas para marcar con su olor las flores visitadas recientemente y comunicar a otras recolectoras que ha estado allí y se creía que las abejas que están libando evitaban estas flores. Sin embargo, esto recientemente se ha demostrado que es falso. En un nuevo descubrimiento, se determinó que las abejas utilizan realmente la 2-heptanona como anestésico para paralizar a los intrusos con su picadura y eliminarlos de la colmena.
-Feromona de reconocimiento de la Cría
La misma es responsable de que las obreras nodrizas se encarguen de los cuidados que necesitan las larvas en una colonia. Las larvas y pupas emiten una feromona de reconocimiento de la prole. Esto inhibe el desarrollo ovárico en las abejas obreras y ayuda a las abejas nodrizas a distinguir las larvas de las obreras de las larvas de zángano. Esta feromona es una mezcla de diez componentes de ésteres de ácidos grasos, que también modula relaciones de castas entre adultos y depende de la ontogenia de forrajeo y de su concentración.
– Feromona del zángano
Los zánganos producen una feromona que atrae a otros zánganos a los lugares donde vuelan en congregaciones en los sitios adecuados para la realización de los vuelos nupciales con las reinas vírgenes.
-Feromonas de la abeja reina
O-aminoacetofenona es una feromona producida por las reinas vírgenes y liberadas con las heces.
Por otra parte, la feromona mandibular (PGC), emitida por la reina, es uno de los conjuntos más importantes de las feromonas en la colmena de abejas. Afecta el comportamiento social, el mantenimiento de la colonia, formación de enjambres, el comportamiento de apareamiento, y la inhibición del desarrollo de los ovarios de las abejas obreras. Los efectos pueden ser a corto y / o largo plazo. Algunas de las sustancias químicas que se encuentran son ácidos carboxílicos y compuestos aromáticos, los cuales han demostrado ser importantes en la atracción y cortejo hacia la reina.
– Feromonas de las Crías
Las Feromonas que libera la larva inhibe el desarrollo de los ovarios de las obreras al igual que las feromonas reales.
Las larvas liberan feromonas que atraen a las nodrizas y las inducen a amamantarlas, esas feromonas son tan fuertes que son capaces de cambiar el lugar de ubicación de un enjambre.
-Feromona de detección de los huevos
Es similar a la que se ha descrito anteriormente, ayuda a las abejas nodrizas a distinguir entre los huevos puestos por una obrera, y los puestos por la reina.
– Feromona de las huellas
Esta feromona es dejada como un rastro por las abejas cuando vuelan y complementa a las feromonas de la glándula de Nassanoff en busca de néctar.
También es una secreción aceitosa de la reina producida en las glándulas del tarso que se depositan en el panal mientras camina a través de él. Esto inhibe la construcción de celdas reales (lo cual inhibe la formación de enjambres), y su producción disminuye con la edad de la reina.
– Feromona Forrajera
El oleato de etilo es liberado por las abejas forrajeras para retardar la maduración de las abejas nodrizas. Esta feromona actúa como regulador distribuido para mantener el equilibrio más beneficioso para la colmena entre las abejas nodrizas y las abejas pecoreadoras.