La Comisión Europea creará una plataforma que garantice la trazabilidad y autenticidad de la miel

Screenshot_1

La “Plataforma de la Miel” constará de 90 miembros, durará al menos cinco años, se reunirá como mínimo 2 veces al año.

  • La nueva “Plataforma de la Miel” se creará en noviembre de 2024 con el objetivo de adaptarse a la nueva Directiva de composición y etiquetado de miel
  • La Comisión abre una convocatoria para reunir a 90 expertos que conformen la futura plataforma

A mediados de diciembre de 2026, los países de la Unión Europea (UE) comenzarán a aplicar una nueva norma común: la Directiva de la miel. Esta norma modifica las anteriores directivas relativas a este recurso sobre composición y etiquetado, y supone importantes medidas para garantizar una mejor calidad y seguridad de la miel que se produce y se importa en la UE.

Para la UE, que dedicará 610 millones de euros entre 2023 y 2027 a apoyar su sector apícola, y que es el segundo mayor productor de miel del mundo, este mercado es clave para proteger a todo el sector agroalimentario.

Cuando la Directiva se aplique, los envases de miel deberán incluir un etiquetado con los países de origen en orden descendente según el porcentaje de aportación miel en la mezcla del producto final. Además, los Estados de la UE podrán exigir porcentajes determinados para las cuatro primeras aportaciones mientras representen más del 50 % de la mezcla. 

Asimismo, la Comisión Europea (CE) tiene 4 años para presentar su regulación sobre los métodos de análisis armonizados para detectar adulteraciones de la miel con azúcar; y cinco años para establecer métodos de trazabilidad del origen y criterios para verificar que la miel no se sobrecalienta y que el polen no se desecha cuando llega al consumidor.

De momento, la CE, junto al Centro Común de Investigación, trabaja para establecer métodos analíticos validados para detectar la adulteración con azúcar de las mieles. Plataforma de la Miel.

Coincidiendo con la entrada en vigor de nueva regulación relativa a la miel, la Comisión abrió el pasado junio una convocatoria de expertos para desarrollar las nuevas normas para el establecimiento de la plataforma y los miembros de la misma.

Los expertos ayudarán a la CE acerca de métodos de armonización que permitan detectar la adulteración de la miel, el origen de las mieles y hasta los productores de las cosechas y los importadores.

La “Plataforma de la Miel” constará de 90 miembros, durará al menos cinco años, se reunirá como mínimo 2 veces al año y tendrá cuatro funciones fundamentales:

  • Reunir datos sobre métodos de mejora de los controles de autenticidad de la miel.
  • Dar recomendaciones para conseguir una trazabilidad comunitaria.
  • Establecer unos criterios correctos de composición de las mieles.
  • Estudiar la posibilidad de establecer un laboratorio de referencia de la Unión Europea sobre la miel.

Los expertos pueden ser:

  • Autoridades de los Estados miembros que se encarguen de la implementación de la Directiva de la miel, especialmente encargados de temas de regulación, control y laboratorios.
  • Organizaciones representantes de partes interesadas en la cadena de suministro de la miel con conocimientos en áreas que cubra la Directiva de la miel, que operen en dos o más Estados miembros y que sean activos en al menos uno de las siguientes fases de la cadena de suministro: apicultores; envasadoras/licuadoras de miel; operadores comerciales; logística, minoristas, mayoristas y operadores del sector food service; consumidores, con miras a una representación equilibrada de los diferentes actores y etapas de la cadena de suministro alimentario.
  • Organizaciones representantes de la sociedad civil en ámbitos cubiertos por la Directiva.
  • Expertos designados a título personal del sector privado que hayan demostrado su conocimiento y experiencia en los ámbitos cubiertos por la Directiva.
  • Expertos designados a títulos personal provenientes del mundo académico, incluyendo universidades, institutos de investigación y otras organizaciones científicas que hayan demostrado conocimiento y experiencia en los ámbitos cubiertos por la Directiva.

Más sobre las nuevas normas

Las nuevas normas comunes sobre la composición y el etiquetado de la miel, denominadas ‘directivas del desayuno’, pretenden orientar a los consumidores a elegir los productos con mayor conocimiento de causa, garantizar una mayor transparencia sobre el origen de los productos y eliminar el fraude alimentario.

Cuando comience a aplicarse la directiva a mediados de 2026, en el caso de las mezclas de mieles, las etiquetas deberán mostrar los países de origen en orden decreciente, en función del peso y el porcentaje que representa cada Estado.

Los países podrán decidir que, en el caso de la miel comercializada en su territorio, se permita indicar únicamente el porcentaje de las cuatro partes principales, si estos países representan más del 50 % de la mezcla.