Esperan una buena cosecha en el Valle

Hay más de 200 pequeños y medianos productores en la región. Aunque el clima complicó a los emprendedores, prevén una mejor temporada que el año pasado. La actividad viene en crecimiento.

La cosecha de miel en la región comenzó la primera semana de enero y los productores esperan una buena temporada a pesar de algunos factores climáticos. Solo en el Valle de Río Negro y Neuquén hay más de 200 apicultores pequeños y medianos.

En los últimos años se han sumado más productores que encuentran en la apicultura una actividad económica en crecimiento frente a otros rubros como la fruticultura que hace décadas viene en crisis.

En medio del gran conflicto económico y laboral por la desaparición de actividades productivas o industrias que han cerrado, la gente ha buscado alternativas en otras producciones de las economías regionales. Unos se han volcado al invernadero, otros a la miel, a la deshidratación de frutas y hortalizas.

Las generaciones entre los 25 y 45 años han incorporado un sector de alimentación saludableen donde la miel tiene una importante participación. Han surgido emprendimientos de miel con agregados de jengibre y menta por todo el movimiento naturista que avanzó en el país.

La actividad ha ido en crecimiento por personas que lo hacen por hobby y otros que lo eligen por su economía principal.
Este año la temporada arrancó bastante bien, luego se frenó y con las últimas lluvias en el Valle empezó a levantar de vuelta la mielada, el panorama es bastante bueno. Sin embargo, no todos tendrán una buena cosecha. Quienes poseen sus colmenas en la zona de J.J. Gómez y Chacramonte están un poco complicados, hubo muy poca floración y el clima no ayudó mucho. El año pasado cosecharon más de 500 kilos, este año viene más flojo.

El balance podrán realizarlo al final de la temporada en febrero-marzo.

La Cooperativa Comahue

La función de la cooperativa que está compuesta por 23 socios es prestar un servicio a los integrantes de la organización y a otros productores. Se les brinda la posibilidad de usar las máquinas para extraer miel y fraccionar.
A los socios se le cobra un 8% y al no socio un 10%. Además, al integrante de la cooperativa se le devuelve la cera y participa de las compras comunitarias de insumos para las colmenas.

Los socios tienen de 20 colmenas en adelante en Roca, Allen, Centenario, Arroyito, Picún Leufú y Senillosa. La organización trabaja con técnicos del INTA.